Transparencia

Acaba de publicarse la última calificación a los 32 estados de la República mexicana, en cuanto a información pública, por un organismo independiente llamado Aregional. A los cuales se les califica del 10 al 100, siendo esta última calificación la máxima, la cual ningún estado alcanzó, siendo el más cercano el Distrito Federal con 90 puntos.
Únicamente aprobaron 8 estados, incluido el Distrito Federal, de los cuales sólo dos son gobernados por el PRI, cinco son gobernados por el PAN y el D. F. por el PRD. De los estados priístas son Veracruz y Sinaloa, de los cuales se sabe a nivel nacional que están siendo bien gobernados, el primero por Miguel Alemán, quien se ha preocupado por hacer un buen papel como hijo de un ex presidente de la república y que tiene todo el dinero del mundo, así que lo único que le interesa es quedar bien con su gente, ya que dinero no le hace falta en lo más mínimo. El segundo es Julio Millán, quien como buen político de muchos años también se ha cuidado mucho de hacer muy bien las cosas, tan es así que las últimas dos maquiladoras que se fueron del estado, se fueron a Sinaloa porque allá les ofrecieron muchas cosas que aquí no les quisieron dar.
Al principio de esta administración federal se implementaron los programas de "marcha hacia el sur" y "Puebla-Panamá", lo cual provocó reacciones airadas de Patricio Martínez, ya que acusó al Presidente Fox de querer quitarle la industria maquiladora para llevársela al sur, pero la sorpresa ha sido que los propios estados vecinos como Sinaloa se pusieron a trabajar en serio en lugar de hacer únicamente declaraciones de insultos que no conducen a lugar alguno y ahí están los resultados a la vista.
Chihuahua ocupa el lugar número 23 de la lista, es decir que en cuanto a información pública estamos reprobados con una calificación de 44 de 100, y cómo no íbamos a estarlo si sólo ellos saben lo que están haciendo y cómo lo están haciendo, así tenemos el ejemplo de la macroplaza, que se sabe lo que van avanzando, pero nadie conoce el proyecto completo, de qué calle a qué calle va a llegar, qué es lo que va a haber en esa macroplaza, cuánto se va a invertir, etc.
De la misma manera que respondió el secretario de Finanzas sobre el faltante de 900 millones de pesos en los ingresos de fondo para infraestructura que deberían haber ingresado desde el 20 de diciembre del año pasado y hasta el estado de ingresos y egresos del 28 de febrero sólo han ingresado 82 millones. En lugar de aclarar dónde estaba esa cantidad de dinero, se molestó y me retó a darme unas clasecitas de análisis e interpretación de estados financieros, clases que yo gustoso acepté, pero que al final de cuentas me dejaron plantado, no obstante que habían ofrecido las clases, de tal manera que si esto le sucede a un diputado, ¿se imaginan qué respuesta puede obtener un ciudadano?
Sometí al pleno del Congreso del Estado una iniciativa de punto de acuerdo para que la comisión de Vigilancia revisara los ingresos del fondo para la infraestructura, pero ese mismo día, sin que se la hubieran turnado a su comisión para su estudio, el presidente de dicha comisión ya la estaba rechazando (el diputado Víctor Valencia de Los Santos) sólo porque la había propuesto un servidor Chihuahua había avanzado en la transparencia en el sexenio anterior, habría que recordar los análisis que hace el Tecnológico de Monterrey, en los cuales nuestro estado salía entre los primeros, y hoy hemos sufrido un retroceso hasta caer en los últimos lugares.
Los tiempos modernos exigen transparencia, no podemos ir en sentido contrario, porque es como meterse al periférico de la Juventud en sentido contrario en la hora pico del tráfico.