Contrabando: diálogo de sordos

Hace apenas tres años que todas las fuerzas políticas en el H. Congreso del Estado se pusieron de acuerdo, y aprobaron que el gobierno estatal sacara su famoso "engomado verde", para poner orden con todos los vehículos "chuecos" que circulaban impunemente por todo el estado. Posteriormente se logró que el H. Congreso de la Unión autorizara regularizar todos los automóviles y pick ups que habían sido internados ilegalmente al país. Sin embargo han pasado apenas dos años y ya se ven muchísimos autos "chuecos" de nueva cuenta, y no sólo eso, sino que ahora son trailers y tortons, que ya no son patrimonio familiar, sino patrimonio de trabajo.
Durante semanas y meses hemos escuchado cómo todas las autoridades locales del PRI, desde el mismo gobernador hasta diputados y presidentes municipales, se han quejado del contrabando de vehículos y mercancía que continúa entrando al estado a manos llenas. Iniciativas de punto de acuerdo se han presentado por diversos diputados priístas, las que han sido aprobadas. Sin embargo a la hora que las autoridades aduanales toman la decisión de empezar a incautar toda la mercancía "chueca", resulta que ninguna autoridad local priísta les da el apoyo que se les solicita. Con muy diversas disculpas, desde que no se tiene el convenio de colaboración entre esa entidad federal y el estado, pero ¿cuál convenio se ha firmado por parte del estado con la Federación?, pero eso sí muy exigentes de que apoyen al estado desde la Federación. Así tenemos que no se han firmado el convenio de desarrollo social; el convenio de vivienda y suelo urbano; el convenio de seguridad pública. Entre muchos otros convenios que ya por pose o por actitud, no se han firmado, ni se firmarán mientras el gobernador Patricio Martínez continúe despachando desde la oficina del primer piso de Palacio de Gobierno, pero fortunadamente ya queda menos de un año y medio para que tengamos un nuevo gobernador.
Ciertamente que no estamos diciendo que en la Aduana son unos angelitos, ya que no deberían haber permitido la entrada de vehículos y mercancía "chueca" el estado, pero desgraciadamente siguen existiendo policías fiscales y comandantes corruptos que mediante la "módica" cantidad de cien dólares les permiten pasar. Esto no se va a terminar mientras no se termine con estos personajes corruptos y ciudadanos corruptos que quieran seguir introduciendo mercancía de contrabando, que en muchos casos por ignorancia no saben que es más barato pagar los impuestos correctamente y de esta manera se tiene todo de manera regular.
Pero si la mercancía por el conducto o lo manera que sea, se encuentra en el estado y la autoridad de la Aduana Interior (que no es la misma que la fronteriza) quiere poner orden decomisando esa mercancía, pero resulta que las policías municipales y estatales los dejan solos y los "fayuqueros" por la vía de la fuerza rescatan su mercancía, así que ¿dónde esta la congruencia? De pedir a gritos que las autoridades aduanales actúen y cuando lo hacen los dejan solos. Los policías fiscales de la aduana interior en la ciudad de Chihuahua son sólo seis o siete elementos, así que con esa gran fuerza policiaca es imposible que puedan con una turba de gente, que con la fuerza bruta recuperan sus trailers y su mercancía contrabandeada.
¿Dónde quedó el estado de derecho? Así que si alguien se está robando la energía eléctrica como acostumbran en algunas colonias de algunas ciudades, la autoridad competente no va a poder actuar, "porque no se tiene el convenio respectivo". El colmo de los colmos se da el fin de semana con el diputado priísta Guillermo Márquez Lizalde, de Ciudad Delicias, donde anuncia que va a defender a todos los comerciantes que venden mercancía pirata y que va a solicitar el apoyo de todo el Congreso del. Estado para que esos "comerciantes" no se vean perjudicados en su actividad, ya que el procedimiento que usaron las autoridades para incautar dicha mercancía no fue el correcto, como si el procedimiento de "comercialización" de dichos productos fuera muy correcto. ¿Dónde quedaron todas aquellas voces que pedían a gritos que se combatiera el contrabando y la impunidad? ¿Estará cayendo la máscara de que sólo eran poses políticas para golpear al gobierno del Presidente Fox, como lo hacía casi todas las semanas Pedro Domínguez Alarcón, hoy candidato a diputado federal por el sexto Distrito?
Es muy claro que los males que tiene este país y que han enraizado por más de 70 años de gobiernos "revolucionarios" o "robolucionarios", no van a desaparecer de la noche a la mañana y menos si desde el antiguo partido en el poder se sigue tirando la piedra y escondiendo la mano y no dando el apoyo que se necesita para poder erradicar esos males de tantos años.
El contrabando no se va a acabar mientras se siga con ese diálogo de sordos, donde sólo se escucha el griterío de los priístas y a la hora de actuar no se les encuentra por ningún lado. ¿Cuándo se acabará este doble discurso?