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Carta de un ciudadano: Ley Electoral

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 1 de Octubre de 1997 Página 6 Sección A

La semana pasada el grupo de diputados priístas y el diputado perredista con su mayoría en el Congreso del Estado aprobó una nueva Ley Electoral para el estado de Chihuahua, la cual esperamos no entre en funciones al lograr la ciudadanía el referéndum.

El Partido Acción Nacional se opuso a dicha reforma, en primer lugar porque no se consultó a la ciudadanía; y en segundo, porque los ciudadanos no quieren más diputados, lo que significa un mayor costo para la comunidad y de lo cual ya hemos hablado en editoriales anteriores.

En la reforma a la Ley Electoral aprobada por el PRI y el PRD se regresa al ya superado sistema de listas de partido, con el gran inconveniente de llegar al Congreso sin haber estado en contacto con los electores, por lo que difícilmente puede llamarse a los diputados representantes del pueblo, al cual no visitaron y con el que no intercambiaron opiniones para ver sus necesidades.

Esto también volverá a originar ruido hacia el interior de los partidos, de todos ellos, algo que ya se había superado: las famosas cuotas de poder a grupos o corrientes dentro de los partidos. Sistema que había sido superado con la ley anterior en beneficio de los partidos políticos y los ciudadanos, al que ahora se pretende regresar.

En el artículo 13 de la nueva Ley, carente de toda técnica legislativa, la nueva redistritación se remite a un hecho incierto, a propuesta que se supone realizará el Instituto Federal Electoral, porque el PRI no sabe cómo hacer una nueva redistritación -dado que no propone nada al respecto-, así la nueva Ley queda en la nada jurídica.

El nuevo presidente del Instituto Federal Electoral será electo al igual que el presidente del Tribunal Electoral, únicamente por el Congreso; dicho en otras palabras, pasan la decisión al PRI, porque ahí es donde ahora ellos tienen la mayoría.

El presidente del Instituto podrá ejercer el presupuesto de manera unipersonal, que incluso puede llegar a ser arbitraria, y no como antes, que era de manera colegiada.

Al derogar el artículo 61 se elimina la prohibición de que consejeros y funcionarios del Instituto Estatal Electoral puedan ser postulados candidatos sin necesidad de esperar tres años. Así regresamos a lo que ocurrió por décadas en nuestro país: que de los organismos electorales se pasara a funcionarios de gobierno o a candidatos y viceversa.

Ciertamente se introducen algunas novedades, como la de la figura del síndico, que deberá ser electo en una boleta aparte en la elección de ayuntamiento, en el cual el síndico tendrá las funciones de vigilancia.

Parece increíble que la mayoría de las iniciativas del Partido Acción Nacional que han entrado al pleno del Congreso tengan más de un año en la congeladora, y sin embargo esta reforma electoral sorprende que sea aprobada en menos de 30 días.

También sorprende que la Cuenta Pública, que se encuentra prácticamente dictaminada y lista para ser aprobada al igual que la Cuenta Pública de algunos organismos descentralizados, continúen sin entrar al pleno del Congreso para ser aprobadas o rechazadas. ¿Será que quieren esperar a que estemos en plena campaña electoral?

Esperamos que toda esta Reforma se venga abajo con la participación de la ciudadanía, que se encuentra actualmente en proceso de solicitud del referéndum, con lo cual seguirá en vigencia la Ley anterior, la cual demostró su bondad en los procesos electorales anteriores, al no haber prácticamente inconformidades de los partidos políticos.

El referéndum es una forma democrática participativa que por primera vez en México estrenamos en Chihuahua, porque así lo decidieron los chihuahuenses.