Imprimir Página         

Carta de un ciudadano: El Veto

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 13 de Octubre de 1997 Página 7 Sección A

La semana pasada el Ejecutivo estatal devolvió al Congreso del Estado la nueva Ley Electoral con observaciones, entre las cuales comentaremos las siguientes:

La nueva ley se puede calificar como contrarreforma porque regresa a esquemas superados, como el relativo al sistema de asignación de diputados de representación proporcional, pues otorga la facultad de nombramiento a las jerarquías de los partidos, sistema ya superado por su falta de características democráticas.

El artículo 13 de la contrarreforma viola el artículo 40 de la Constitución del Estado, pues la determinación de los distritos debe establecerse en la ley y no en un decreto posterior.

Además, para no violar, según ellos, el artículo 105 constitucional, manda la redistritación a un decreto posterior, pero los 90 días que marca dicho artículo ya se vencieron, porque la ley dice que el proceso electoral iniciará durante la primera quincena del mes de enero del año de la elección.

Esta manipulación constituye una violación al espíritu de la Constitución federal, ya que el legislador ordena evitar una alteración fundamental 90 días antes del inicio del proceso electoral, lo cual viola el elemento de certidumbre a favor de todos los actores que habrán de intervenir en el próximo proceso electoral.

La fracción priísta y el diputado perredista pretenden burlar la Constitución reformando el artículo 56 que dice que el proceso inicia la primera quincena de enero del año de la elección y ahora pretenden que inicien en la segunda quincena de enero, con lo cual cualquier Legislatura local podría estar moviendo los 90 días que marca el artículo 105 a su libre antojo.

La contrarreforma no define quién habrá de ejercer las facultades de los órganos electorales entre el lapso del inicio de la vigencia de dicho proyecto y la constitución, tanto del Instituto Estatal Electoral como del Tribunal Estatal Electoral. Dicha omisión puede ser por falta de técnica legislativa o por la intención de desaparecer los órganos existentes para dejar en un estado de indefinición jurídica el ejercicio de las facultades de éstos, lo que provoca una situación demasiado grave al dejar a un número importante de ciudadanos que han iniciado la convocatoria para solicitar un referéndum contra la reforma constitucional que da vida a esta contrarreforma electoral. Lo correcto sería que los órganos electorales actualmente constituidos continuaran en funciones hasta que los nuevos órganos se constituyeran con base en la contrarreforma electoral.

En cuanto a que ningún género tenga más del 70% de las candidaturas de los plurinominales, sin ser esta una razón del veto del Ejecutivo, un servidor se permite comentar que es una vacilada más, con tal de querer hacer popular su proyecto de contrarreforma, porque si se quisiera realmente dar una mejor participación a la mujer, debería ser en todas las candidaturas a puestos de elección popular y no sólo en las diputaciones plurinominales. Esto pudiera ser aceptable por un período de tiempo determinado, como 6 ó 9 años.

Adicionalmente la misma contrarreforma propone que de no otorgarles el 30% de las "pluris" a las mujeres, si sólo fuera el 20%, se les deberá poner en segundo lugar, y si sólo fuera el 10% deberán ir en primer lugar. ¿Y si no es ni el 10%? No sucede nada, o sea una tomada de pelo más.

Ojalá los diputados priístas y el diputado perredista entiendan que su contrarreforma está mal planteada y que deberán dejarla pendiente para una mejor ocasión.

Los chihuahuenses quieren seguridad y transparencia en las elecciones, como ya se ha dado en las que hemos tenido con la ley actualmente en vigor, donde en algunos distritos o municipios se reconoció al partido ganador hasta por menos de 100 votos, sin haber tenido protestas mayores como existían anteriormente.