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Candidaturas

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 2 de Febrero de 1998 Página 7 Sección A

En un proceso antidemocrático desde su inicio, ya que no podían participar como candidatos los miembros de ese partido, el PRD eligió a su candidato a la gubernatura.

Antidemocrático también por el hecho de que la elección se llevó a cabo de manera cupular por 60 miembros de su Consejo Estatal, es decir, que los miembros de ese partido fueron excluidos de todas; quienes siguiendo la bandera que ese partido ha enarbolado de la participación de la mujer, desde hace días que ya se veía venir la línea muy clara a favor de Esther Orozco.

Enhorabuena que una mujer es nombrada candidata, sin embargo en esa actitud antidemocrática le cerraron las puertas a un gran luchador social como es Víctor Quintana, ya que por acuerdo del mismo Consejo quienes participen en una precandidatura ya no podrán participar en ninguna otra, por lo que le cerraron las puertas a cualquier otro puesto de elección popular.

Los señores del PRI se fueron a otro extremo tratando de recuperar terreno perdido ante la precampaña, así abrieron su proceso a toda la ciudadanía chihuahuense. Lo anterior significa que el PRI no tiene un padrón interno de militantes, porque anteriormente consideraba a todos los empleados y trabajadores gubernamentales de los tres niveles de gobierno como automáticamente miembros del partido.

El proceso de selección priísta, muy peculiar por cierto, no deja de ser una réplica del proceso de selección que en algunos lugares ha puesto en operación el PRD, su hijo renegado, y de la misma manera intentará copiar algunas esquemas de su adversario a vencer que son los panistas.

Desde ahora podemos asegurar que el ganador en este proceso, desde hoy candidato prácticamente, es el filósofo de Rubio, mejor conocido como Artemio Iglesias, quien desde hace más de 12 años está trabajando para lograr la gubernatura y les hará las mismas mapacherías que él estila, en su propia elección interna.

Patricio se quedará como precandidato, confiando en la popularidad que cree tener, pero que a nivel estatal y con la estructura priísta no tiene nada que hacer. ¿Tendrá los 10 años de militancia que exige la convocatoria? Que se conozca públicamente, Patricio ingresó al PRI con su candidatura en el '92 a la Presidencia Municipal.

Mario de la Torre sabe de antemano que también se quedará como precandidato, pero como buen personaje institucional de su partido obedecerá inscribiéndose, a cambio de seguir recibiendo los beneficios que en forma generosa su partido le ha dado.

Gustavo Ramos Becerra se quedará como precandidato también, con todo y los tenis, la cachucha y la texana listos, porque no importa como dice el dicho popular, "aunque la mona se vista de seda, mona se queda".

El senador Héctor Murguía ni como precandidato quedará, porque se quedará estudiando y analizando la convocatoria y finalmente los tiempos se le correrán para entrar en una justa a la que nunca pensó entrar si no era con la bendición directamente de quien decide en su partido.

¿Qué sucederá con el priísta Bernardo Pérez Acedo? Pareciera que la convocatoria lleva dedicatoria para que este personaje que ha gastado millones en propaganda no pueda inscribirse ¿No sería más transparente que le permitieran que entrara a este proceso, según ellos democrático y transparente, a ese militante que fervientemente ha deseado participar? ¿No sería más fácil permitirle participar, para ver si tiene la popularidad que él dice, o si no su propia militancia sea quien lo decida?.

Lo que no cabe duda es que el Partido Acción Nacional en este proceso electoral que apenas empieza, es el que lleva la delantera, por mucho, a todos los demás partidos, a los cuales está obligando a hacer lo que en su vida habían pensado.

Para cuando estas líneas salgan, en el Partido Acción Nacional habrá candidato a la gubernatura, el cual fue electo en una convención limpia, transparente y democrática, elección hecha por los militantes de este partido y de entre sus propios afiliados, de frente a la sociedad chihuahuense, a la que finalmente se deben los partidos políticos.

Así como inician las campañas, así se llegará al final, donde los demás partidos vendrán siempre a la zaga de Acción Nacional.