Transición

México se encuentra en una etapa de transición en donde no acabamos de salir del subdesarrollo, como tampoco acabamos de llegar al desarrollo pleno y asimismo no acabamos de llegar a un mundo globalizado y de dejar atrás proteccionismo, centralismo, paternalismo y todos los "ismos" que tanto daño nos han hecho.

Muchas instituciones en el país se encuentran también transitando hacia nuevos esquemas y así tenemos a todos los partidos políticos en una época de transición de la cual todos quisiéramos llegar a lugar seguro.

El PAN se encuentra en una transición porque ya no es un partido de oposición, sin embargo todavía nos sentimos en algunas ocasiones como un partido cien por ciento opositor. Tampoco hemos acabado de llegar a ser un partido en el poder y en ocasiones pareciera que no acabamos de ejercer dicho poder.

Transición, que significa transitar de una situación a otra, no necesariamente quiere decir que llegaremos a donde se pretende, porque en el camino podemos llegar a destinos muy diferentes a los que se pensaba, o inclusive pudiéramos regresar al punto de partida. Situación difícil en la que nos encontramos todos los partidos políticos, ya que en el PRI su condición es totalmente inversa a la del PAN, es decir ellos han sido el partido en el poder, sin embargo todavía no aprenden a comportarse como un partido de oposición como ya lo son por decisión del pueblo.

En el PAN cuando éramos prácticamente oposición todos los militantes actuábamos por convencimiento, por metas y objetivos en donde no importaba el hombre o la mujer, sino los principios por los cuales actuábamos. Hoy en día en que se ha tenido el poder, muchos militantes se mueven en función del deseo de poder llegar a un puesto determinado y va quedando atrás aquella mística que se tenía cuando no teníamos nada.

No digo que sea incorrecto que la gente tenga deseos de llegar a los puestos públicos, pero lo que no deberemos perder nunca de vista es que sobre personas o grupos lo más importante son los objetivos comunes como es el lograr el bien común y la unidad del partido porque finalmente es ésta la única que puede sustentar los futuros triunfos de cualquier personaje.

Bien dice Felipe Calderón que lo más importante es "conquistar el poder sin perder el partido", porque con cada victoria que se obtiene pareciera como que todos los militantes se van hacia el lado de la estructura del poder. Tenemos que encontrar el punto de equilibrio entre la estructura de gobierno y la estructura partidista que deben ser totalmente separadas pero comunicadas entre sí, porque de otra manera estaríamos conquistando el poder y a la vez que esto sucediera estaríamos perdiendo el partido.

El tropezón que sufrimos el pasado 5 de julio nos ayudará a reforzar el partido para conquistar de nueva cuenta el poder y nos debe ayudar a reforzar una estructura de un partido más fuerte, más unido y con más mística para servir a los ciudadanos, para poder lograr una patria ordenada y generosa donde podamos vivir mejor los chihuahuenses.