Sigo sin Entender

Bien dice el dicho que "el que mal empieza, mal acaba", y este es el caso del actual presidente municipal.

Todos recordamos los problemas que tuvo el actual alcalde de Chihuahua al inicio de su gestión con su Director de Seguridad Pública Municipal, José Refugio Ruvalcaba, quien por poco provoca un motín de la policía en contra de la autoridad municipal al ser destituido y negarse a dejar el cargo, dejando prácticamente a la ciudadanía sin seguridad.

Cómo no recordar la guerra de los arbolitos, cuando el actual alcalde quitó los árboles sembrados en el canal por Patricio Martínez, quien declaró: "Si quiere pleito que se suba al ring y que escoja los guantes", respondiendo el alcalde Ramos Becerra: "Sólo está haciendo sombra, viendo moros con tranchete".

Tampoco podemos olvidar la guerra con la Canaco; primero la guerra de los pescaditos provocada por los inspectores municipales por 12.5 toneladas de pescado que fue confiscada, aunque después se confirmó que se encontraba en perfectas condiciones. También recordamos el pleito del restaurante "Viva Villa" del propio presidente de la Cámara.

Desde el inició de sus gestión el problema de la inseguridad bancaria, los asaltos y los pleitos con el Centro Bancario, el cual dura hasta nueve días.

A casi un mes de que deje el poder, se "filtra" a los medios de comunicación una serie de deudores del impuesto predial, entre los que destacan connotados políticos y curiosamente aparece en primer lugar el gobernador electo, Patricio Martínez, de quien por cierto el doctor Gustavo Ramos Becerra fue suplente cuando aquél fue alcalde de 1992 a 1995. ¿Las viejas rencillas vuelvan a florecer?

En un arranque de tratar de defender dicha filtración a los medios, el alcalde dice que es una información que se les acaba de entregar a los regidores, pero que no estaba actualizada porque era del mes de enero de este año. En lugar de solucionar este problema lo está agravando más, porque precisamente los regidores de oposición se han quejado estos tres años de que el presidente municipal y sus funcionarios les entregaban información obsoleta, inútil, distorsionada, o cuando no les daba gana no les daban la información.

Efectivamente, como dice el licenciado Héctor Villasana (del mismo partido que el alcalde) en escrito público el ejercicio del poder publicó se basa en objetividad, honestidad, veracidad, legalidad y moralidad, por lo que al dar a conocer los nombres de las personas que ha cumplen con su obligación de pagar el impuesto predial, se comete un grave desacato constitucional, ya que las somete al juicio crítico de la sociedad, ocasionando un daño moral irreparable y violando la ley penal, pero además faltando a los objetivos del servidor público, siendo en algunos casos información falsa porque al día de hoy muchos de los mencionados se encuentran al corriente en el pago de dicho impuesto.

Más grave aún resulta que el mismo escrito del licenciado Villasana destapa una coladera más del drenaje por el cual circula el sistema político priísta, y resulta que en el DIF Municipal y en la Subdirección de Catastro se encuentran familiares del alcalde que legalmente no deberían desempeñarse como funcionarios municipales.

En fin, que yo sigo sin entender cómo es que sigue ganando el PRI, después de tantos eventos como los del actual alcalde.