No al Fobaproa

De nueva cuenta el asunto del Fobaproa volvió a ser noticia en esta semana, tema que se viene dando desde marzo en que el Presidente Ernesto Zedillo mandó la iniciativa al Congreso.

Finalmente el PAN elaboró y votó un "plan punto final" para apoyar a deudores con planteamientos sustentados en su capacidad real de pago y atendiendo prioritariamente a la persona física.

De ninguna manera se protegerá a los responsables del descalabro financiero, se fincarán responsabilidades a servidores públicos, banqueros, campesinos, empresarios o partidos políticos que lucraron con los recursos del Fobaproa (caso de Cabal Peniche y su apoyo al PRI).

Buscamos que los delincuentes de cuello blanco sean castigados y devuelvan los recursos que indebidamente tomaron.

Aunque los medios de difusión han dado a entender que la iniciativa original fue aprobada con el apoyo de los diputados de Acción Nacional, la realidad es que el PAN rechazó la iniciativa del Presidente y ofreció una nueva alternativa para poder rescatar al país del problema financiero en que lo metió un gobierno inútil e ilegal.

La propuesta del Presidente era de pasar a deuda pública para que pagáramos todos los mexicanos a través de nuestros impuestos la nada despreciable cantidad de 552 mil millones de pesos, que para este mes se convertía en 609 mil millones con los intereses tan sólo de marzo a diciembre. La propuesta del PAN aprobó que sólo se pasaran 260 mil (menos de la mitad) a deuda pública, y el resto se devolvería al sistema bancario para que se responsabilice de tu cobranza o de las pérdidas en su caso.

Por otro lado, se autoriza un fondo de 18 mil millones de pesos para hacer un programa de respaldo al ahorrador y en auxilio a los que deben para que puedan rescatar sus bienes que tienen actualmente a punto de perder, porque en muchos casos la deuda que aparece en el banco es muy superior no sólo en el valor del crédito, sino al del mismo bien.

Por primera vez se establece un programa de apoyo a todos aquellos mexicanos que se vieron envueltos en problemas de pago, sin responsabilidad alguna de su parte, sino por el error de diciembre y que desafortunadamente al Gobierno no se le había ocurrido que así como estaba apoyando al sistema financiero debería haber apoyado a los deudores para que pudieran salir del problema en el que su propio Gobierno los metió. Así se impulsarán programas de ahorro con descuentos y quitas del 60 por ciento para el sector campesino y de 45 por ciento para el micro, pequeño y mediano empresario.

Acción Nacional no fue culpable de la crisis financiera, pero no podía ser tan irresponsable de dejar al país en un estado de indefensión con un sistema bancario quebrado y simplemente haber levantado el dedo índice para señalar a los culpables y dejar al país hundido financieramente, con un daño irreversible para las generaciones mexicanas por venir.

En la situación actual, la solución propuesta por el PAN y apoyada por el PRI no es la mejor, pero sí la menos mala para las condiciones en que la tiene un Gobierno ineficaz e irresponsable. Con esta solución se evita que los mexicanos pierdan sus ahorros y se pretende que los deudores de la banca puedan de nueva cuenta salir adelante.

El PRD, por su parte, le apostó desde un principio al no diálogo, pensando que sería su bandera hacia el 2000, aunque el país se fuera al barranco; le apostaron a la crisis y al desastre, como el que ve un atropellamiento y en lugar de ayudar al herido se dedica a perseguir al culpable.

Acción Nacional dijo no al Fobaproa y ofreció la mejor salida para que México salga adelante.