La Guerrillera del Norte

Así bautizó Diego Fernández de Cevallos a Patricia Terrazas Allen cuando ambos fueron diputados en la Legislatura federal de 1985 a 1988, debido al carácter y la manera de ser de la diputada Terrazas, quien no se dejaba tan fácilmente imponer por su coordinador parlamentario a menos de que la convencieran razonablemente.

Paty fue una persona con inquietudes desde muy joven, ya que llegó a ser presidenta del Consejo Estudiantil del Instituto América, siendo apenas una adolescente en esta ciudad de Chihuahua.

También desde muy joven tuvo claramente inclinaciones hacia el campo, donde fue fundadora y dirigente del Frente Unido de Productores del Campo, organización campesina que abarca las regiones centro, sur y noroeste del estado de Chihuahua, labor a la que se dedicó en cuerpo y alma desde que militaba en ideologías partidistas diferentes al PAN y que continuó haciéndolo con mayor énfasis al ingresar en 1983 a Acción Nacional.

Paty vivía y enseñaba como buena profesora de educación primaria, tecnológica, agropecuaria y media superior, pero siempre lo hacía dando claro ejemplo con su vida de lo que pensaba y creía firmemente.

En sus 16 años como miembro activo del PAN ocupó diversos puestos directivos tanto en los comités municipales como en el Directivo Estatal, y al tiempo de su fallecimiento era integrante del Consejo Estatal, órgano supremo de este partido.

Fue diputada federal, habiendo desempeñado diversas comisiones en la LV Legislatura y también por parte del Comité Ejecutivo Nacional participó en casi la mitad de los estados de la República apoyando para que se tuvieran procesos limpios y legítimos.

En el verano caliente del "86, Paty tuvo la valentía y el coraje para enfrentar al entonces Presidente Miguel de la Madrid y exigirle que se respetara el voto de los chihuahuenses. Siempre actuó convencida, con valentía y con el corazón en la mano defendiendo las causas en las que ella creía.

No obstante haber tenido diversos enfrentamientos y fricciones con el famoso "Jefe Diego" (Fernández de Cevallos), quien fue su coordinador, finalmente terminaron siendo excelentes amigos, siendo Paty uno de los primeros miembros del Comité de Precampaña Presidencial del Licenciado Fernández de Cevallos.

Paty comentó siempre que al morir le gustaría que su cuerpo fuese incinerado y sus cenizas fueran esparcidas en su rancho, para que el campo chihuahuense floreciera de una mejor manera de como había sido hasta la fecha. Sin embargo, pocos días antes de morir cambió su deseo y dispuso que sus cenizas fuesen depositadas junto a los restos de sus padres.

Sin necesidad de esparcir las cenizas en el campo chihuahuense, Paty ha dejado sembrada una enorme semilla que irá dando frutos en el transcurso de los años, porque mujeres valientes, inteligentes, entusiastas y dedicadas en cuerpo y alma a la causa del campo son como una semilla que necesariamente germinará y dará un hermoso fruto para beneficio de la gente más necesitada.

Ha muerto "la Guerrillera del Norte", luchadora incansable, pero su ejemplo ha quedado entre los chihuahuenses que la conocimos y la tratamos, habiendo sido una de las vidas más útiles para Acción Nacional y para Chihuahua.

Descanse en paz Paty Terrazas Allen.