Todos unidos, ¡ya basta!

Pareciera que todos los astros están alineados en nuestra contra, la caída libre de las bolsas de valores del mundo; El desplome de "nuestro" oro negro, el petróleo; la devaluación de nuestro peso contra el dólar americano, que es casi nuestra divisa por lo usual en nuestras transacciones; Las ejecuciones masivas y no masivas que siguen a la orden del día a lo largo y ancho de nuestro Estado y finalmente la baja en las remesas de nuestros paisanos de más del 14% en los últimos meses y el regreso anticipado de estos al perder su trabajo del otro lado.

¡Ya basta! Dijo el gobernador Reyes Baeza el sábado pasado, con motivo de la ejecución masiva en uno de los bares más antiguos y conocidos de la ciudad de Chihuahua, en donde llegaron los sicarios y acribillaron a todos los que se encontraban cerca de dos personas que eran su objetivo, matando a once personas en total y dejando a cinco heridos. ¡Ya basta! Decimos toda la sociedad a nuestras autoridades, sean estas estatales, federales o municipales, ya que como dijo el empresario Martí, si no pueden con la chamba que hoy tienen como autoridades, ¡Renuncien!

El gobernador se queja de que el Gobierno federal no ha atraído ninguno de los más de mil asesinatos violentos con todas las características del narcotráfico que hemos tenido en el estado en lo que va del año, dice él, ¿Y con los otros tantos crímenes que no tienen las características del narcotráfico, se ha logrado detener a los culpables? Yo creo que todos los ciudadanos decimos ¡Ya basta! Todos queremos vivir en paz y las autoridades son los responsables de mantener la paz social que todos queremos. No es tendiendo cortinas de humo como van a lograr desaparecer los problemas que tenemos, ya que aparte de los mencionados en el primer párrafo de esta entrega, hay que sumarle los grandes daños causados por la tromba en Parral y las inundaciones en muchos de los municipios del estado, principalmente en Ojinaga, en donde se perdieron miles de hectáreas de cosechas, causando daño no sólo a sus dueños, sino a toda la gente que normalmente se empleaba en la cosecha y que este año no tuvieron esa oportunidad.

El secretario de Hacienda dijo el miércoles pasado que el Banco de México iba a poner en subasta diariamente 2 mil 500 millones de dólares para que no se devaluara más el peso frente al dólar, sin embargo el viernes tuvieron que ofertar más de 8 mil 600 millones de dólares para detener la caída de peso, es decir que en un solo día se vendió un 10% de nuestras reservas nacionales que teníamos, lo que nos indica que como decía el presidente de los Estados Unidos la semana pasada: "Dinero sí hay, lo que no hay es confianza" y ha quedado demostrado, ya que en México hubo el dinero suficiente para que en un solo día se vendieran 8 mil 600 millones de dólares. A ese ritmo nos podemos acabar las reservas del país en 10 días, lo cual sí nos pondría en el umbral de una devaluación mucho más grande que hasta el día de hoy, parecida a la del error de diciembre de 1994, cuando Carlos Salinas de Gortari, de triste memoria (el mismo que fue recibido casi como héroe por toda la clase priísta hace varios días en la capital del estado, nos dejó la economía prendida de alfileres y luego descaradamente le dijo a su sucesor, Ernesto Zedillo, que para qué le había quitado los alfileres.

El sábado pasado regresaba de Ciudad Juárez y la carretera parecía como si fuera los días previos a Navidad, lleno de paisanos que regresaban a su casa, camionetas llenas de equipaje, los baños de las casetas llenos, así como el estacionamiento, sin embargo no se vio tan lleno los puestos de burritos de Villa Ahumada, lo cual quiere decir que vienen de regreso anticipadamente y con poco dinero.

Nos encontramos ante un escenario nunca antes visto, en donde el mundo parece desmoronarse económicamente, lo cual hace más complicada la recuperación, ya que todos los países están en problemas, las empresas ven como de un día, al siguiente se les agrandan sus deudas en millones de pesos, como ha anunciado Comercial Mexicana, uno de los negocios grandes del país, que se ha declarado en suspensión de pagos, ya que tiene una deuda de 2 mil 80 dólares, lo que quiere decir que sólo la semana pasada ya deben 600 millones de pesos más de lo que debían. Lo que no debemos de permitir es que ese pánico se apodere de todos nosotros porque nada ganaríamos, así que tenemos que pensar positivamente y ver las oportunidades que se nos presentan ante este nuevo escenario, ya que siempre hay debilidades que podemos convertirlas en fortalezas.

Estamos ante un cambio económico global muy grande, pero siempre hay grandes soluciones para los grandes problemas, pero para ello es necesaria la unidad de todos los chihuahuenses en primer lugar y los mexicanos, para enfrentar esta crisis que ya llegó, que sumada a los males que ya padecíamos en el Estado, hacen más compleja su solución, pero somos muchos más los que deseamos vivir en paz, que los que quieren la violencia, somos mucho más los que queremos tener la tranquilidad económica que los que la quieren resolver en unos cuantos golpes de suerte a través de actividades ilícitas o de la especulación de los mercados.

Todos unidos, ¡Ya basta! de tender cortinas de humo para distraer la atención, pongámonos a trabajar, cada quien en su área y vamos a ver como las cosas cambian.