Informe de la CIDH Sobre el "Caso Chihuahua '86". "No Estábamos Equivocados" Declara el Arzobispo Almeida

Mientras que el arzobispo, Adalberto Almeida y Merino reafirmó su postura respecto a las elecciones para gobernador en 1986 y dijo al conocer algunos aspectos del dictamen de la OEA que "si esa organización da esos fallos quiere decir que no estábamos equivocados", el gobernador Fernando Baeza Meléndez declinó emitir opinión alguna al respecto "hasta que tenga conocimiento de manera oficial de dicho dictamen".

Por su parte, Guillermo Luján Peña, quien acudió en principio a la OEA-CIDH demandando su intervención en las controvertidas elecciones de Chihuahua: "Qué bueno que un organismo internacional reconozca que ha habido violaciones a los derechos ciudadanos en México; aunque tarde, pero resulta positivo".

"Que el gobierno entienda que tarde que temprano debe corregir esa clase de errores y que, a la par con todos los países que reordenan sus procesos electorales, no debe quedarse atrás, procurando una patria mejor para todos los mexicanos", agregó Luján Peña.

A su vez, el jefe del departamento de Gobernación, Sergio Granados Pineda manifestó que ese asunto está fuera de la competencia estatal.

El arzobispo Almeida y Medina, expresó que "esas son cosas que pasaron y nosotros en su momento creímos oportuno manifestar nuestra postura y así lo hicimos, porque además pensamos que era necesario".

Las declaraciones del prelado fueron hechas después de haber escuchado en breve los puntos más importantes del dictamen de la Organización de Estados Americanos en el que afirma que la "legislación mexicana en materia electoral no garantiza los derechos políticos de los ciudadanos y que los órganos de autoridad electoral no son ni independientes ni imparciales".

Aclaró el arzobispo Almeida que "no sé si vale la pena revivir esos acontecimientos en estos momentos o cuál sea el objetivo, hicimos lo que creímos que debíamos hacer y si la OEA dice eso quiere decir que no estábamos equivocados", reiteró.