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Carta de un diputado: ¿Informar o no informar?

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 23 de Septiembre de 1995

La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, es la autoridad competente para fiscalizar el gasto público del Ejecutivo Federal y de los organismos y empresas paraestatales, y es la Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda a través de la cual se ejerce dicha fiscalización.

Por primera vez en la historia del país la presidencia de la Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda, está en manos de un diputado de la oposición, en este caso del Partido Acción Nacional.

EI dra 1º de septiembre el presidente Ernesto Zedillo en su "mensaje" que rindió ante el Congreso de la Unión, dijo que mandaría una iniciativa de ley para darle mayor fuerza a la fiscalización del gasto público y que esa función era y debería de seguir siendo del Poder Legislativo.

EI doce de septiembre , tan sólo, unos días después, el presidente de dicha comision, Dip. Juan Antonio García Villa, acompanado de los secretarios de la misma comisión, Marco Antonio Michel Díaz del PRI, Salvador Beltrán del Río del PAN y el Dip. César Chávez del PRD, tuvo la "osadía" de dar a conocer a los medios de difusión el resultado de 551 auditorías a dependencias del gobierno federal y organismos y empresas descentralizadas, lo cual provocó el enojo del Ejecutivo Federal y de su partido, quien por voz del Secretario de Hacienda, Guillermo Ortiz, diputados federales y senadores, se rasgaron las vestiduras diciendo que todo era mentira.

Obra en mi poder la versión estenográfica de dicha rueda de prensa en donde consta que nunca se dieron cifras, sino se les entregó el reporte ejecutivo del resultado de dichas auditorías, que dicho sea de paso únicamente cubren el 7.2% de las operaciones del gobierno federal y el 13.3% de las operaciones de los organismos descentralizados y empresas de participacion estatal mayoritaria.

Consta en dicha versión estenográfica que el Dip. García Villa habló de desviaciones, insuficiencias, deficiencias, Etc. y que por lo tanto no podía dar un monto porque en algunos casos de deficiencia, ni tan siquiera podía cuantificarse, porque era por ejemplo obras que no se licitaron, debiendo hacerlo y así sería como sumar duraznos con manzanas y con peras.

Sin embargo los medios de difusión se han encargado de dar a conocer algunas de estas desviaciones "que existe un importe de 44.4 millones de nuevos pesos de desviaciones en el Departamento del Distrito Federal, que en la licitación de obras como carreteras, plantas hidroeléctricas y oleoductos se dejaron de pagar impuestos de importación por 130 millones de nuevos pesos, que en Conasupo hay un faltante de 5 mil toneladas de maíz" y una serie de afirmaciones, que no fueron mencionadas en dicha rueda de prensa.

Pero lo importante y realmente de fondo es que sólo se revisó el 7.2 % de las operaciones del gobierno federal, es decir, quedó el 92.8% sin revisarse y las desviaciones, insuficiencias y deficiencias, todas son de millones de nuevos pesos, lo que nos podría lIevar a asegurar que los recursos del pueblo que fueron desviados o deficientemente empleados, pueden ascender a miles de millones de nuevos pesos.

EI segundo aspecto importante de esta rueda de prensa, es que dichas auditorías se refieren al año de 1993, y muchos mexicanos se preguntaran ¿por qué hasta ahora? y el problema es que de acuerdo con la ley, dichas auditorías están realizadas en tiempo y forma por lo que se requiere cambios legales para que la Cámara de Diputados pueda ejercer la revisión de cuentas públicas, desde el mismo momenta que en están sucediendo dichas operaciones y no a posteriori, en que 24 meses después estamos conociendo el resultado de dichas auditorías.

EI tercer punto importante es si realmente el presidente Ernesto Zedillo quiere que el Poder Legislativo ejerza la función fiscalizadora del gasto público o fue simplemente un mensaje bonito, como muchos otros que hemos escuchado de nuestros gobernante del partido oficial.

Para finalizar, lo que los gobernantes no deben de olvidar, del partido que fuere, es que los recursos que ellos manejan no son suyos, sino del pueblo que paga a través de sus impuestos y que fue el que los eligió, y es al pueblo al que se Ie debe de informar, cómo, cuándo, y en qué se gastó su dinero.