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Nunca, nunca más

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 18 de Septiembre de 2001 Página 4 Sección F

Hace aproximadamente cinco años que tuve la fortuna de visitar Israel, lugar donde, curiosamente no obstante ser el mundo tan grande, nacen, viven y mueren dos grandes personajes que fundan dos grandes religiones: Jesucristo y Mahoma. A partir del nacimiento de estos dos grandes personajes, hace ya más de tres mil años, esta zona del planeta no ha tenido paz.

Platicaba en aquella ocasión con el embajador de México en Israel y nos recomendaba que únicamente nos cuidaramos de los lugares muy concurridos porque el fanatismo religioso de algunas gentes que pensaban que su Dios les había ordenado matar a mucha gente pecadora en algun centro comercial o discoteque y si ellos morían en ese evento, mucho mejor, porque era como su pasaporte al paraíso. De que te vayan a robar, no te preocupes, porque aquí eso no sucede, pues al que sorprendan robando Ie cortan la mano -nos decía el embajador-, pero contra el fanatismo religioso no se puede.

La semana pasada presenciamos como ese fanatismo mató a miles de vidas que todavía no han sido cuantificadas, pero que finalmente van a sobrepasar las 30,000, porque tan sólo en los edificios del World Trade Center trabajaban 50,000 personas, más las que iban regularmente a hacer negocios en esos edificios, más los que iban pasando por la calle, que en ese lugar y a esa hora era un verdadero "hormiguero" normalmente, menos los que pudieron ser evacuados con vida, nos va a dar un cantidad monstruosa de seres humanos sacrificados inocentemente por esos terroristas que creen que su Dios les ha dado el mandato divino de matar a los pecadores de esa nación.

Ese martes negro quedará registrado en la historia de la humanidad como un parteaguas en la historia contemporanea, el mundo se paralizó y nos negábamos a creer que las escenas que nos transmitían por televisión eran ciertas, queríamos que en un determinado momento los locutores nos dijeran que era una broma o los avances de alguna nueva película. Pero nada de eso sucedió y a una semana de distancia empezamos a digerir qué fue lo que pasó.

Ha sido una larga semana en la que se han ido desencadenando una serie de sucesos que indudablemente van a dejar huella en el mundo. EI Congreso norteamericano ha autorizado fondos suficientes para reparar la ciudad de Nueva York y el Pentágono, más las ayudas internacionales que han estado llegando, no cabe duda que en poco tiempo el daño material estará reparado, pero el daño de miles de vidas perdidas, la angustia de sus familiares y el daño sicológico y moral, ese nunca, nunca más va a ser reparado.

EI centro financiero más importante de los Estados Unidos fue destruido, se perdieron miles de vidas valiosísimas, información muy importante que se va a Ilevar mucho tiempo reconstruir, el corazón financiero fue atacado brutalmente y se va a Ilevar un buen rato repararlo. La otra parte atacada fue no menos importante: el Pentágono, centro de información de la seguridad nacional de este país y del mundo, al grado de que sobre los daños en ese edificio poco se sabe, por no decir que nada, sólo se dijo que en esa área trabajaban 189 personas, esa es toda la información, falsa o cierta, no nos dice nada, sigue siendo secreto de Estado. EI imperio norteamericano fue violentado en dos lugares primordiales.

A lo mejor la comparación no es la correcta, pero es como si a su familia se Ie metiera alguien a su casa un día, violara a su esposa e hija y además matara a su mamá.

Difícilmente se puede predecir como reaccionaríamos. Es un atentado muy grave en contra de una familia, eso más o menos les sucedió a los norteamericanos, porque además no saben con certeza quién fue, pueden tener cierta información que conduce a ciertos personajes como el árabe Osama Bin Laden, que tiene una fortuna petrolera de más de 300 millones de dólares y desde hace algún tiempo se siente lIamado por su Dios para destruir a los pecadores norteamericanos. Ha estado entrenando desde niños a odiar a los Estados Unidos y aunque se ha deslindado públicamente de ser el autor de los atentados, es como el que se introdujo en nuestra casa y atacó a nuestra familia: de loco reconoce que él fue, y más sabiendo el poder que tiene ese país para ir a acabarlo donde quiera que se encuentre. Situación difícil para los norteamericanos, porque saben que les han declarado la guerra, pero no saben con certeza quién fue.

EI Congreso de los Estados Unidos también autorizó los fondos que sean necesarios para acabar con esos terroristas y Ie dio todas las facultades al presidente Bush para que haga lo que tenga que hacer, pero que este crimen no quede impune. ¿Esto nos puede Ilevar a la tercera guerra mundial? Esperemos que no, porque con los armamentos que existen en la actualidad es probable que el mundo se acabe, baste recordar como quedaron Hiroshima y Nagasaki, el pasado 6 de agosto se cumplieron 56 años de ese atentado contra la humanidad, donde los noticieros de la época a traves de fotografías mostraban esas ciudades convertidas en nada, era un panorama de destrucción humana nunca antes imaginado.

Eventos como los de hace 56 años en Japón y los de la semana pasada, nunca, nunca más.