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Carta de un diputado: La cloaca

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 29 de Julio de 1996 Página 6 Sección A

Cuando Miguel de la Madrid dejó la Presidencia de la República, se decía que había sido el más austero y mesurado de los últimos presidentes, sobre todo después de dos sexenios de locura como lo fueron los de Luís Echeverría Álvarez y José López Portillo en que nos gastamos hasta lo que no teníamos, de modo tal que al siguiente presidente no le dejaron para dónde hacerse, así que tuvo que ser austero.

Menos mal que fue el presidente austero, porque en esta semana nos enteramos por notas periodísticas que Miguel de la Madrid creó un fideicomiso, no se sabe para qué, ni quién es el beneficiario (pero ya lo imaginamos), de dos mil millones de dólares en Luxemburgo y que le costó 90 millones de dólares la creación de dicho fideicomiso.

Según el asesor financiero Milton Durán, de El Paso, Texas, este fideicomiso lo fundó Miguel de la Madrid, antes de ser presidente, o sea que con su muy elevado sueldo de burócrata que fue toda su vida había logrado tener unos "ahorritos" y con ello puso el fideicomiso y como "buen patriota", porque para ser presidente del país debe uno serlo, mejor puso su fideicomiso en el extranjero, donde para nada ayuda a los mexicanos que tanto dicen querer, más bien sería para que no nos enteráramos.

Pero esto no es más que la punta del iceberg, o quizá ni a eso llegue, porque como decíamos, lo hizo antes de ser presidente, ya siendo presidente se dice que algunos fortunas de las más grandes del país, como la de Cabal Peniche o la de Bernardo Domínguez, pudieran ser de Miguel de la Madrid. Menos mal que fue el más austero.

Esta semana platicaba con uno de los diputados de la Comisión Conasupo, me decía que los diputados del PRI simplemente decían que la orden había llegado de arriba de detener la investigación. Recordarán que la investigación había llegado a que Ernesto Zedillo, siendo secretario de Programación y Presupuesto, había autorizado el pago de la pequeña cantidad de quince millones de dólares a Roberto González (a) "El Maseco" por daños causados en no entregarle a tiempo los subsidios del maíz a Maseca.

Me decía este diputado que la investigación demostraba que al "Maseco" se le entregaba el subsidio por adelantado de todo el año y que siempre al final del año ajustaban cuentas del subsidio y normalmente el "Maseco" devolvía dinero, o sea que aparte de darle por adelantado un año, "jineteaba" dinero de más y que sólo en esa ocasión no se le había entregado a tiempo el subsidio por el cual le pagaron la módica cantidad de quince millones de dólares.

La verdad es que cuando nos damos cuenta cómo se hacen esas fortunas tan rápida y geométricamente grandes, es muy reconfortante y tranquilizante para todos los mexicanos, porque algunos de nosotros ya nos sentíamos mal con nosotros mismos, pensábamos que no teníamos la inteligencia suficiente o no trabajamos tan duro como se requería, porque ni con 25 años de trabajo de sol a sol, ni con todos los estudios del mundo, podíamos llegar a tener ni el 10% de lo que algunos de estos buenos mexicanos han hecho en tan sólo uno o dos sexenios.

Estas son sólo algunos de los "últimos" casos de que nos han enterado los medios de difusión escritos, porque de la televisión, como dicen, "ni sus luces", pero lo más triste es que sólo es la punta del iceberg, porque son mucho más los casos que no se conocen, que los pocos que están saliendo a la luz pública.

¿Llegaremos a saber con cierta aproximación todo el mugrero que ha pasado en nuestro país? Yo creo que difícilmente lo lograremos, no por lo que dicen algunos de que una vez que se destape la cloaca nos va a salpicar a todos, sino porque es tan grande la cloaca que nos podemos caer todos dentro de ella.

Decía un ex procurador general de la República que lo que realmente une a las personas es la complicidad, por ello va a ser muy difícil lograr descubrir toda la verdad y castigar a esos "buenos mexicanos" , pero sería muy sano para el país que sí se lograra, ya que hasta hoy sólo se ha castigado a uno o dos por sexenio y esto no ha sido suficiente para que se detenga la robadera por parte de funcionarios públicos.

El Congreso de la Unión debe pasar una ley en que se castigue con más dureza a quienes roban a todos los mexicanos, hasta hoy sólo hay leyes muy duras para el particular que deje de pagar impuestos, para los narcotraficantes, pero nada se ha hecho para castigar en serio a quienes abusan del pueblo de México, lo que es tan o más grave que los demás delitos.