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Al diablo las encuestas

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 29 de Noviembre de 2005 Página 5 Sección F

Recordamos con toda claridad cómo Andrés Manuel López Obrador, alias "El Peje", buscaba que todas las encuestadoras del país sacaran los resultados rápidamente y los publicaran, ya que todos sin excepción le favorecían por amplio margen.

Recordamos con toda claridad también al "Peje" con un periódico "Reforma" en la mano, diciendo que era un medio de difusión muy serio, de los más prestigiados del país y que las encuestas de ese periódico eran de lo más confiable que había. Pero ahora resulta que así como decía "la Chimoltrufia" del chavo del ocho, así como digo que sí, ahora digo que siempre no. Así, en la semana que acaba de terminar casi todas las encuestas dan como resultado a un López Obrador cayendo estrepitosamente, al igual que Madrazo y el único que va subiendo es Felipe Calderón, del PAN.

Algunas todavía ponen ligeramente arriba a López Obrador, como la de Mitofsky, pagada por Televisa, pero que aún está por el margen de error con que se manejan las encuestas de más - menos tres o cuatro puntos. La verdad es que aún en estas encuestas, si le quitamos tres puntos a López Obrador de los 35% que dice tener y le sumamos tres puntos a Calderón de los 29%, están en lo que se conoce como "empate técnico".

Pero la que le reventó el semblante al "Peje" fue la encuesta de "Reforma", que los pone en un 29% contra un 28% de Calderón. Primero dijo "El Peje" que le daba flojera opinar sobre esas encuestas, días después dijo que se trataba de "un compló" contra él del periódico "Reforma", que antes era muy serio y confiable, para favorecer al candidato del PAN.

Finalmente "tronó" y en un evento ante militantes o simpatizantes de su candidatura dijo: "al diablo las encuestas". Perdió todo el equilibrio y su supuesta ecuanimidad al saber que ya había caído más de 15% en las preferencias electorales y que Calderón había subido del 6% con que empezó la precampaña al 28%, es decir 22%. De Madrazo ya mejor ni lo mencionamos, pues ni los de su partido lo ven con buenos ojos.

Afortunadamente para los mexicanos ya tenemos una opción viable, porque la gente se encontraba un poco angustiada, ya que no hallaba si votar por "el populista" López Obrador o "el autoritario" Roberto Madrazo, ambos hijos del mismo partido, con los mismos principios.

¿No tiene la más mínima humildad López Obrador? Yo creo que se le cayó el cielo, aunque por supuesto que él no cree en esas cosas. Recordamos como todos los demás precandidatos reconocían que iban en desventaja en las encuestas anteriores y ahora "El Peje:' no puede aceptar lo que antes no sólo aceptaba, sino que lo presumía. Así es la política: como una rueda de la fortuna, unas veces estás, arriba y otras estás abajo; lo malo es no reconocerlo.

Hace unos días le preguntaban a López Obrador cuál era la diferencia entre él y Hugo Chávez, el dictador insolente de Venezuela, y la respuesta lo pinta de cuerpo entero: "La diferencia entre Hugo Chávez y yo es que él es venezolano", dijo "El Peje". Afortunadamente ya va de bajada y esperemos que mantenga esa tendencia de ahora al 2 de julio del año que entra.

"Al diablo las encuestas" puede convertirse en la frase que marque el parteaguas de un candidato que se sentía blindado contra todo, pero resulta que ya se le apareció la horma de su zapato y se llama Felipe Calderón.