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El agua no es un tema político

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 25 junio de 2013 Página Sección B

El agua es un derecho inalienable que tiene todo ser humano, y como tal es un derecho universal, indivisible e inviolable, según la Constitución Política Mexicana y las declaración de principios de la ONU, y según la UNESCCO, el agua es un elemento para que las ciudades sean sostenibles y por lo tanto es una obligación de las autoridades proporcionar el vital líquido. El derecho al agua consiste en un abastecimiento suficiente, físicamente accesible y a un precio razonable, de un agua segura y de calidad aceptable para usos personales y domésticos. Una cantidad adecuada es necesaria para prevenir la mortalidad y no solo para prevenir el riesgo de transmisión de enfermedades asociadas a la mala calidad del agua, sino para su consumo, para preparar alimentos, para su higiene personal y domestica. Una cantidad suficiente de agua por habitante, se considera en 250 litros diarios, de tal manera que hagamos cuentas para ver las mentiras que nos dicen nuestras autoridades, sobre este tan importante tema. Según el INEGI, la ciudad de Chihuahua tenía 809,232 habitantes en 2010, que con una tasa de crecimiento del 2.5% anual, nos lleva a 869,924 habitantes al día de hoy, aproximadamente. Estos habitantes consumen 217.5 millones de litros al día, si todos tuvieran agua las 24 horas, pera ya ve que las actuales autoridades tiene a toda la ciudad con tandeo, es decir en ratos no hay agua y en otros ratos… tampoco. Pero hagamos cuentas al 100%. Dividimos entre 24 horas que tiene el día, entre 60 minutos que tiene la hora y 60 segundos que tiene al minuto. Nos da 2,517 litros por segundo lo necesario para que todos tuviéramos agua las 24 horas del día, los 365 días al año. Pero Maurilio Ochoa, titular de la JMAS declaró que actualmente se están suministrando 4,304 litros por segundo a la red de agua potables (agua suficiente para 1.487 millones de habitantes) y que para septiembre serán 4,600 litros por un nuevo acueducto que nadie sabe que se está construyendo por el lado del aeropuerto, declaración que nadie le creyó ya que conociendo el protagonismo del gobernador, seguramente desde la primera piedra hasta la última, nos hubieran enterado por todos los medios, como las 16 presas que dice que construyó y nadie sabe donde están o los cientos de miles de kilómetros de carreteras (desde Alaska hasta la Patagonia, pero de ida y vuelta, decían los comerciales) , que tampoco sabemos donde están. El mismo funcionario declaró que “alguien había cerrado las válvulas” que abastecen de agua a las colonias del sur de la ciudad. ¡Qué ingenuidad! Las colonias del sur se quedaron sin agua porque la mandaron a la nueva feria de Santa Rita. Feria que costó 350 millones de pesos, que en lugar de resolver el problema del agua, tema al que no le han invertido un peso y la ciudad continua creciendo, pero la feria les produce votos, ya que al pueblo “circo, maroma y teatro”, aunque les falte el agua, que con $50 millones se hubiera resuelto, cuando menos el sur de la ciudad; el pavimento en sus colonias, con $100 millones se resuelve, o el alumbrado público al que le faltan $90 millones. Hace años se firmó un convenio entre la federación y el estado, a través de CONAGUA, donde la federación se compromete a devolver al estado el concepto que se cobra en los recibos del agua y que se identifica como derecho federal de extracción. Anualmente la federación entrega $100 millones y el Estado debe de poner otra cantidad igual para invertirlo en infraestructura hidráulica y de estos recursos al municipio de Chihuahua le tocan el 40%. ¿Dónde están estos $80 millones anuales? Para defenderse, Maurilio Ochoa, dice que hay cuentas morosas por $1,700 millones, cuando hace un año dijeron que eran $400 millones, pero aclara que en este año han cobrado $100 de adeudos ¿? Total que ni para cobrar han servido, ni para mentir, menos para darle agua a los habitantes de esta sedienta ciudad. Gobernador Duarte, el problema del agua no es político, como usted lo ha declarado, ni un tema de campaña, es un derecho universal del hombre, que a ustedes no les han preocupado resolver porque es una obra que no se ve, es una obra enterrada y dicen que el político que hace obras enterradas se entierra con ellas.