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La iniciativa fiscal de Peña Nieto, un atentado contra los mexicanos

El Heraldo de Chihuahua Chihuahua, Chih. 1 octubre de 2013 Página Sección B

Esta es la tercera semana que le dedicamos este espacio al atentado que Peña Nieto quiere hacer en contra de los mexicanos, a través de la miscelánea fiscal que mando al Congreso de la Unión y que es francamente atentatorio contra los ciudadanos de este país. Atenta, porque en caso de aprobarse tal cual la mandó, que esperamos que la manden por el tubo del drenaje los legisladores, va a acabar de empinar a México en la recesión en la que ya nos encontramos en tan solo 9 meses de la actual administración priísta federal. Con esto sería como echarnos por un tobogán. Atenta, porque en lugar de cobrarle a los grandes evasores de impuestos, le quiere cargar la mano a quienes hemos estado pagando puntualmente los impuestos, que es la clase media del país. ¿Quiénes son los grandes evasores? Por un lado la economía informal, que ya alcanza al 60% de los causantes y con estas medidas, es probable que algunos pasemos de la economía formal a la informal y nos protegeremos con tantas agrupaciones que han fomentado la cultura del no pago. El otro bloque de evasores fiscales, son los grandes corporativos que son los que deciden el destino de este país, nos guste o no nos guste, y que con arreglos bajo la mesa con el gobierno federal, simplemente no pagan impuestos y vemos como tienen un crecimiento espectacular y algunos diríamos, “así, cualquiera”. Según reportes de la misma Secretaría de Hacienda, le deben 453 mil millones de pesos, y el 50% de este importe se concentra en 60 consorcios que simplemente no pagan y con el aval de hacienda: Las empresas de Carlos Slim, el hombre más rico del mundo (así cualquiera) adeuda 70 mil millones de impuestos: Grupo Carso: 4 mil millones. América Móvil, 20 mil. Telecom: 23 mil. Telmex 15 mil y Telmex internacional 15 mil (todos son millones de pesos). Grupo CEMEX de Lorenzo Zambrano, debe 38 mil. Grupo México, el mismo de los muertos de Pasta de Conchos, de Germán Larrea, otro de la lista de los 500 más ricos de FORBES, así como los dos anteriores, debe 11 mil millones. Industrias Peñoles y Palacio de Hierro, de Alberto Bailleres, otro Forbes mexicano, debe 6 mil millones. Televisa, exentada en la ley de Ingresos del 2010 para que pudiera participar a gusto en la fibra óptica, debe 2.3 mil millones. TV Azteca y Elektra, de Salinas Pliego debe 3 mil. Coca Cola Femsa debe 2 mil millones. Bachoco, el de los huevos del ex gobernador de Sonora debe casi 2 mil millones. Grupo Modelo, la cervecera con mayor exportación del vital líquido, debe 8.2 mil millones. Wall Mart, la trasnacional con ventas más grandes a menudeo, del mundo, debe 5.2 mil millones al fisco. Soriana debe 7.5 mil millones. Liverpool debe casi 4 mil millones. Kimberly Clark, de Claudio X: González, el empresario que urgió al gobierno, para que los mexicanos pagáramos más impuestos y sugirió un 3 al 4 % de IVA en medicinas y alimentos, pero él no ha pagado casi 2 mil millones de impuestos. De las grandes desarrolladoras de vivienda: URBI debe 4.5 mil millones y aún así ha caído en falta de pago a sus acreedores en varias ocasiones en lo que va del año. HOMEX, debe igualmente 4.6 mil millones. Casa GEO debe 3.3 mil millones. Casas ARA 1.8, mil millones de deuda al fisco. Por falta de espacio, no pongo a todas demás grandes empresas que deben miles de millones al fisco. Si se cobrara tan solo a las grandes empresas lo que deben impuestos y se repartiera entre los 110 millones de mexicanos, nos tocarían de 2 millones por habitantes, sin importar su edad, sí, leyó usted bien, por cada habitante, es decir que una familia de 5 hijos, papa y mamá, les tocaría 14 millones a esa familia. Se imaginan y aún así quieren cobrarnos más impuestos. En las redes sociales y por otros medios, se ha visto el total rechazo a esta iniciativa presidencial, que de reforma con sentido social, no tiene nada, más bien es un contra sentido social, ya que atenta contra la sociedad. La iniciativa fiscal de Peña Nieto, un atentado contra los mexicanos, que esperamos que nuestros diputados federales y senadores no la aprueben.